Reseñado por María Fernanda Salamanca Mora
Código 23092047
Nietzsche, retoma la discusión del pupilo y su maestro filosofo, que trata de darle un enfoque, esta vez, no hacia el problema radical de la cultura sino, más bien trata de identificar y enumerar los problemas de las escuelas que enseñan esa cultura, por lo tanto recurre a la crítica de las instituciones que imparten la cátedra que es orientada, según él hacia la creación libre y carente de conocimiento previo.
Código 23092047
Nietzsche, retoma la discusión del pupilo y su maestro filosofo, que trata de darle un enfoque, esta vez, no hacia el problema radical de la cultura sino, más bien trata de identificar y enumerar los problemas de las escuelas que enseñan esa cultura, por lo tanto recurre a la crítica de las instituciones que imparten la cátedra que es orientada, según él hacia la creación libre y carente de conocimiento previo.
Esta institución que es atacada por los personajes de la narración, es la del bachillerato, porque es ahí donde empiezan los problemas verdaderos de la educación, que sería básicamente la producción del alumno sin conocimiento previo; podemos asimilar que el alumno del bachillerato es poco conocedor de bastantes asuntos que son de difícil comprensión ya que él se encuentra en un proceso de aprehensión del conocimiento y no está preparado aún para generarlo y en la metodología del bachillerato (de esa época y en algunos casos de la actualidad) le ordena generar textos, criticas, ensayos, sin ni siquiera enseñarle lo primordial para que el educando tenga las herramientas suficientes para generar una producción de calidad.
El filosofo hace alusión a la importancia del que debería ser el verdadero eje del estudio de la lengua materna, el cual está mal orientado por parte de ese sistema e indica que debería estar enfocado hacia el estudio de la lengua en sí misma, lo que quiere decir que se debe hacer un previo estudio de lo clásico que este dentro de la lengua que sea la que lo rija para así poder tener las herramientas suficientes para la adecuada producción del tipo de texto que se quiera generar; asimismo confronta la cultura clásica helénica con la de su contemporaneidad y honra la forma como los griego aprendían, su método era primeramente la pasión sobre su lengua, es decir que estudiaban constantemente su lengua en profundidad para tener los instrumentos para poder utilizarlos de forma apropiada. El filósofo también critica el hecho de que la cultura se vuelque hacia lo vulgar ya que no se exigen estándares altos de producción y más bien se tiende a producir como los periodistas; se debe exigir la perfección pero para ello se debe ilustrar al educando poniéndolo ante un mundo lleno de producciones pertinentes enfocadas hacia la riqueza de la cultura y así tenga los recursos suficientes para que pueda componer con calidad.
Se establece entonces por parte de los filósofos, una de las realidades de la institución del bachillerato que es la falta de conciencia por parte de los educadores al impartir sus conocimientos sin tener claros los puntos de sus falencias y del sistema que los gobierna, ellos deben ser los moldeadores de las generaciones siguientes y olvidan su labor generando una atmosfera de mediocridad entre ellos mismos y entre los educandos.
